miércoles, 23 de mayo de 2012

Cruce del más acá al más allá

Hacerse perpetuo e infinito, inolvidable. Pensar en la eternidad, ir y volver. Avanzar y nunca detenerme. El estar intrigado de cuerpo y claro de mente. Vivir a diario; caminar en dirección al siempre y dejar el nunca junto a los sueños muertos. 

Cruza el tiempo para vivir infinitamente en el alma de los relojes. Conocer como los ojos cruzaran de una acera a la otra. Recorrer el cuerpo a través de sus raíces. Conectar tu voz con la del mañana y vivir para seguir viviendo. El no dejar de parpadear para poder observar cada detalle de tus pestañas y luego comenzar a no sentir esa humedad. Interiorizar lo externo y exteriorizar lo interno. Dejar atrás lo superfluo y tomar lo verdaderamente importante. 

Convertir el mañana en el hoy para que ayer sea igualmente mañana.

La vida ... el despojarse de la vida misma, su alma errante en el espacio infinito de la nada y el todo.

Sin correcciones y de manera original desde el escrito verdadero.

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